Santo Domingo, 22 oct (Prensa Latina) El ministro dominicano de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, participará hoy en una reunión del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre la situación en Haití, informó la Cancillería.
Se trata del encuentro trimestral que realiza este órgano para dar seguimiento a las condiciones en la nación fronteriza, indicó la fuente en un comunicado de prensa.
Puntualizó que el cónclave tendrá lugar en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, ocasión en la que Álvarez tiene previsto reiterar la posición de República Dominicana respecto a la inseguridad en el vecino país, que también les amenaza.
En esta intervención el titular estará acompañado del representante permanente de República Dominicana ante la ONU, embajador José Blanco.
La institución recordó en la nota que el Consejo de Seguridad de la ONU estableció que el tema relacionado con la crisis en Haití se debatirá en ese escenario cada tres meses, o cuando algún miembro solicite una reunión especial.
El Gobierno dominicano inició a comienzos de este mes un plan de deportación masiva de haitianos indocumentados en un intento por controlar la migración irregular desde Puerto Príncipe, asolado por la violencia de pandillas y la pobreza, según argumentó.
Organizaciones políticas y sociales repudian aquí la detención y regreso a Puerto Príncipe de 10 mil haitianos semanales y piden que se detengan los abusos y agresiones por parte de agentes de Migración, quienes niegan el uso de la violencia.
La Dirección General de Migración (DGM) confirmó la víspera que un total de 23 mil 535 haitianos retornaron a Puerto Príncipe en los primeros 17 días de octubre.
Precisó que de ese total 15 mil 488 fueron devueltos por las autoridades locales y los demás cruzaron la frontera de manera voluntaria.
En los operativos participan agentes migratorios con la colaboración de las Fuerzas Armadas, el Ejército, la Fuerza Aérea, la Policía Nacional y el Ministerio Público, entre otros organismos.
Apenas inició el plan, el Gobierno de Haití condenó «las deportaciones masivas y discriminatorias sin respeto a los procedimientos legales y sin consideración a la dignidad humana, en un contexto de creciente xenofobia».
El viernes pasado el Gobierno de Luis Abinader ratificó su repudio a tales denuncias, “que incluyen un supuesto racismo de Estado”, en una carta enviada a las misiones diplomáticas en este país caribeño.
mpm/mpv
Se trata del encuentro trimestral que realiza este órgano para dar seguimiento a las condiciones en la nación fronteriza, indicó la fuente en un comunicado de prensa.
Puntualizó que el cónclave tendrá lugar en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, ocasión en la que Álvarez tiene previsto reiterar la posición de República Dominicana respecto a la inseguridad en el vecino país, que también les amenaza.
En esta intervención el titular estará acompañado del representante permanente de República Dominicana ante la ONU, embajador José Blanco.
La institución recordó en la nota que el Consejo de Seguridad de la ONU estableció que el tema relacionado con la crisis en Haití se debatirá en ese escenario cada tres meses, o cuando algún miembro solicite una reunión especial.
El Gobierno dominicano inició a comienzos de este mes un plan de deportación masiva de haitianos indocumentados en un intento por controlar la migración irregular desde Puerto Príncipe, asolado por la violencia de pandillas y la pobreza, según argumentó.
Organizaciones políticas y sociales repudian aquí la detención y regreso a Puerto Príncipe de 10 mil haitianos semanales y piden que se detengan los abusos y agresiones por parte de agentes de Migración, quienes niegan el uso de la violencia.
La Dirección General de Migración (DGM) confirmó la víspera que un total de 23 mil 535 haitianos retornaron a Puerto Príncipe en los primeros 17 días de octubre.
Precisó que de ese total 15 mil 488 fueron devueltos por las autoridades locales y los demás cruzaron la frontera de manera voluntaria.
En los operativos participan agentes migratorios con la colaboración de las Fuerzas Armadas, el Ejército, la Fuerza Aérea, la Policía Nacional y el Ministerio Público, entre otros organismos.
Apenas inició el plan, el Gobierno de Haití condenó «las deportaciones masivas y discriminatorias sin respeto a los procedimientos legales y sin consideración a la dignidad humana, en un contexto de creciente xenofobia».
El viernes pasado el Gobierno de Luis Abinader ratificó su repudio a tales denuncias, “que incluyen un supuesto racismo de Estado”, en una carta enviada a las misiones diplomáticas en este país caribeño.
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