Por Frank Valenzuela
Manzanillo, Montecristi, – En una jornada marcada por la conmoción y el luto, la comunidad de Manzanillo enfrenta la irremediable pérdida de tres de sus más queridos miembros, quienes fallecieron en un trágico accidente la tarde del pasado martes en el tramo carretero Montecristi-Dajabón, conocido como La 40. Entre las víctimas se encuentran Pedro Manuel Núñez, de 55 años; Yanibel Gutiérrez Chery, de 22 años; y Francisco Henríquez, un valorado miembro de la comunidad recién llegado de Nueva York.
El fatal suceso se produjo cuando el camión del Ayuntamiento Municipal de Pepillo Salcedo, conducido por Pedro Manuel Núñez y en el que también viajaban Yanibel Gutiérrez Chery y Francisco Henríquez, intentó rebasar a un motorista, encontrándose de frente con un autobús de la empresa Caribe Tours. A pesar de que el autobús solo transportaba al chofer y a un ayudante, ambos con lesiones menores, el impacto fue devastador los residentes de Manzanillo.
Francisco Henríquez, quien había regresado a su tierra natal la noche del lunes tras una temporada en la ciudad de Nueva York, había obtenido el camión municipal gracias a la generosidad del Ayuntamiento, con la intención de realizar trabajos y diligencias, especificamene trasportar zinc comprado en Montecristi. Su repentina partida, junto a la de Pedro Manuel y Yanibel, deja un vacío inmenso en el corazón de todos los que tuvieron el privilegio de conocerlos.
La noticia ha sacudido los cimientos de la comunidad de Manzanillo, unida en el dolor y la solidaridad con las familias de los fallecidos. Las muestras de apoyo y condolencias no han cesado desde que se conociera la trágica noticia, reflejo del fuerte lazo que une a los habitantes de la comunidad.
Los velatorios se están llevando a cabo en las residencias de los difuntos, donde amigos, familiares y conocidos se reúnen para dar el último adiós y fortalecerse mutuamente en este momento de inmensa tristeza. La comunidad entera se ha volcado en apoyo a las familias de Pedro Manuel, Yanibel y Francisco, compartiendo recuerdos y expresiones de cariño hacia quienes dejaron una huella imborrable en sus vidas.
Residentes en la comunidad consultado aseguran que a pesar del vacío que deja su partida, el legado de Pedro Manuel, Yanibel y Francisco perdurará en la memoria de Manzanillo. Sus vidas, aunque truncadas prematuramente, nos inspiran a valorar cada momento y a trabajar unidos por el bienestar de nuestra comunidad.
Aseguraron que «en estos momentos de duelo, extendemos nuestras más sinceras condolencias a las familias y amigos de los fallecidos. Que el consuelo llegue a sus corazones y puedan encontrar paz en el recuerdo de sus seres queridos. Manzanillo llora, pero también recuerda y honra a sus hijos caídos, con la esperanza de que su memoria nos guíe hacia un futuro de unidad y cuidado mutuo».