El juicio contra el exsecretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna, arranca este martes en un tribunal de Nueva York (EE.UU.), donde será juzgado por, presuntamente, haber aceptado millones de dólares en sobornos a cambio de ayudar al cártel de Sinaloa a mover drogas y a evitar la captura de sus miembros, informa AP.
García Luna dirigió la sangrienta guerra contra el narco entre 2006 y 2012, durante el Gobierno del expresidente Felipe Calderón. Está previsto que la selección del jurado arranque esta misma jornada.
La Fiscalía de Estados Unidos alega que el exsecretario de Seguridad Pública mexicano aceptó decenas de millones de dólares, que habría recibido a menudo en maletines. Las pruebas en su contra incluyen recibos, aunque no está claro si eran de trabajos oficiales, de consultorías del sector privado, de pagos del cártel u otro tipo de sobornos.
Expectativas del juicio
Además, afirma que siguió viviendo de sus ganancias ilícitas incluso después de mudarse a territorio estadounidense, donde fue arrestado en 2019, aunque su defensa alega que era un empresario legal. El acusado se ha declarado inocente de los cargos de narcotráfico y de empresa criminal continuada. Si es condenado, podría pasar décadas en prisión.
El juicio contra García Luna podría revelar cómo los cárteles han podido operar abiertamente durante tanto tiempo: con sobornos dentro de la Policía y el Ejército mexicanos, así como a otros funcionarios de alto rango.
Está previsto que comparezcan varios testigos gubernamentales, incluidos miembros de alto nivel del cártel de Sinaloa, en un proceso judicial que guarda similitud con el llevado a cabo contra el jefe de esa organización criminal, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, quien fue condenado a cadena perpetua en 2019. Algunas de las acusaciones contra García Luna surgieron, precisamente, durante ese juicio.
El vínculo de García Luna con el narco
El fiscal federal Breon Peace aseguró que los miembros del cártel de Sinaloa pagaron sobornos multimillonarios al exsecretario de Seguridad Pública, quien, valiéndose de su cargo, aceptó ayudarles proporcionándoles seguridad.
«El acusado proporcionó al cártel de Sinaloa, entre otras cosas, un pasaje seguro para sus cargamentos de drogas, información confidencial de las autoridades sobre investigaciones al cártel e información sobre grupos rivales», apuntó Peace.
«Estos pagos permitieron que, en ocasiones, el cártel recibiese avisos anticipados de las operaciones de las fuerzas de seguridad para detener a miembros y permitían que fuesen liberados si eran detenidos», agregó.
RT