MADRID, 11 ago (Reuters) – El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, ha negado que haya influido en la decisión del Barcelona de permitir que Lionel Messi abandone el club de fútbol catalán.
El pasado jueves, el delantero argentino dio un giro de 180 grados a su carrera y se incorporó a la plantilla del París Saint Germain en calidad de traspaso libre.
El presidente del Barcelona, Joan Laporta, achacó la decisión a los estrictos controles del Juego Limpio Financiero (FFP, por sus siglas en inglés) de la Liga.
Sin embargo, Jaume Llopis, antiguo miembro de la junta directiva del Espai Barça -que es el proyecto de renovación del Camp Nou- dimitió de su cargo tras la marcha de Messi antes de acusar a Laporta de plegarse a la voluntad de Pérez.
«La marcha de Messi es una maniobra que favorece a Florentino. Imagínate que ahora Mbappé termina en el Real Madrid», dijo al diario La Vanguardia.
«A Laporta le convencen Ferran Reverter, el nuevo CEO, de que no se puede firmar con CVC (el acuerdo de 2.700 millones de euros de inversión en La Liga), y Florentino Pérez con el proyecto de la Superliga Europea», dijo.
«Se da la circunstancia también de que Ferran Reverter tiene amistad desde hace tiempo con Florentino Pérez y entre ambos le convencen y Laporta cambia radicalmente de opinión y se niega ya a seguir negociando».
Pérez, a través de un comunicado emitido por el Real Madrid, insistió en que sólo se ha reunido con Reverter en dos ocasiones anteriores, una hace cuatro meses y otra el pasado sábado en una cena en la que también estuvieron presentes Laporta y el presidente de la Juventus, Andrea Agnelli.
«(En el momento de celebración de la cena) ya se había producido la comunicación oficial sobre Messi», dijo Pérez.
«Por tanto, es imposible que yo haya tenido alguna influencia ni en la salida de Messi ni en cualquier otra decisión del F.C. Barcelona», añadió.
«Así pues, espero que Jaume Llopis rectifique cuanto antes estas declaraciones que no corresponden con la verdad», concluyó.
Tanto el Barça como el Real Madrid han rechazado la inversión de 2.700 millones de euros propuesta por la liga de fútbol española para obtener un 10% de sus ingresos, ante lo que este último equipo ha emprendido acciones legales.
Junto con la Juventus, siguen aferrados a la idea de una Superliga Europea, que fue un proyecto efímero de principios de este año, cuando nueve de los 12 clubes fundadores se retiraron tras la reacción adversa de aficionados y medios de comunicación.
(Reporte de Joseph Walker; Traducido por Darío Fernández)