La suspensión de una reunión en la sede del CNE, en la que se discutiría el mecanismo para el recuento de votos, generó la reacción de la Misión Electoral de la OEA en la que expresa su preocupación por la falta de resolución de los comicios. Desde el 7 de febrero, Ecuador no sabe quién será el contrincante de Andrés Arauz en la segunda vuelta; un silencio que empieza a incomodar y llenar de suspicacias a los involucrados en la contienda. Ecuador se encuentra sumido en una profunda incertidumbre electoral. Tras nueve días de haberse desarrollado el proceso comicial, continúa la duda respecto a quién será el candidato que disputará la segunda vuelta junto al aspirante Andrés Arauz, quien logró poco más del 30% de los votos en la cita del 7 de febrero.
El presidente saliente Lenín Moreno ha señalado que, debido a la situación, es prioritario ofrecer celeridad para garantizar la transparencia en el proceso. Asimismo, dio instrucciones al Ministerio de Finanzas para que proporcione al Consejo Nacional Electoral (CNE) los recursos necesarios para dirimir la situación, si es que ahí está el problema.
“Me preocupa la suspensión de la sesión del CNE de esta noche. El compromiso de actuar con seriedad y sensatez hacia el país requiere transparencia y sentido de oportunidad en su pronunciamiento. He dispuesto a Finanzas atender requerimientos de recursos si fuese necesario», escribió Moreno en su cuenta personal de Twitter.
En esa misma línea, la Misión Electoral de la OEA emitió un comunicado en el cual, además de mostrar preocupación por el retraso en los resultados definitivos, exige proporcionar «información puntual y constante» sobre el estado del proceso, además de presentar un informe sobre los pasos a seguir en los próximos días.
